La enfermedad desde el punto de vista de la Medicina Tradicional China, es un desequilibrio de nuestra energía ( Qi ), un desesquilibrio entre el yin y yang de nuestro organismo.
La enfermedad puede ser causada por algo externo o interno. En las causas externas tenemos, el calor y la sequedad, el frío y viento, la humedad, los accidentes o traumatismos, y en las causas internas las emociones.
A veces no somos conscientes de ellas y afectan a nuestro entorno y nuestra salud.
A diario sentimos emociones, es algo natural. El problema surge cuando esas emociones son muy intensas y sostenidas en el tiempo.
Las emociones son estímulos mentales que alteran nuestra circulación de energía ( Qi ) y afectan a nuestra consciencia ( Shen ), alterando todo nuestro ser.
La Medicina Tradicional China asocia cada emoción a un órgano de nuestro cuerpo, de manera que la ira afecta al hígado, el miedo al riñón, la preocupación al bazo, la tristeza al pulmón y la euforia al corazón.
Para conseguir tener una vida equilibrada tenemos que gestionar nuestras emociones de manera que no afecte de forma negativa a nuestra salud.
Lo que el corazón quiere sentir, la mente acaba mostrándolo.